forte

jueves, 14 de febrero de 2013

The worst part..



I think.. think when it's all over, it just comes back in flashes, you know? it's like a kaleidoscope of memories, but it just all comes back. But he never does. I think part of me knew the second I saw him that this would happen. It's not really anthing he said, or anything he did. It was the feelin that came along with it. And.. crazy things is, I don't know if i'm ever gonna feel that way again. But I don't know if I should. I knew his world moved too fast and burned too bright. But I just thought, how can the devil be pulling you towards someone who looks.. so much like an angel when he smiles at you? Maybe he knew that, when he saw me. I guess I just lost my balance. I think that the worst part of it all wasn't losing him, it was losing me.

martes, 12 de febrero de 2013

¿me eliges?

Quédate con quien te sueñe y te haga soñar. Con quien te quiera aún de mal humor. Con quien te niegue las mentiras, pero te admita los errores. Con quien te sonría con la mirada y te entienda con solo rozarte. Con quien te robe los besos en vez de pedírtelos. Con quien te sorprenda. Con quien no te juzgue. Con quien te escuche en silencio aunque le estés contando siempre lo mismo. Con quien te deje aburrirle. Con quien te defiende. Con quien te mira cuando nadie se da cuenta. Con quien te espera hasta que llegas de fiesta. Con quien te arranque las penas para cambiarlas por sonrisas. Con quien te diga las verdades. Con quien te bañe en sus ojos. 


Pero sobre todo, quédate con quien te demuestra cada día, que quiere quedarse contigo.

domingo, 3 de febrero de 2013

Smile because you're alive

Entre el blanco y el negro empecé a elegir el gris. Cambié los rotundamente, por quizás. Aprendí que a veces es mejor no engañarse a uno mismo y decir sí perdiendo el miedo al qué dirán. 
Arrojé mis penas al fondo del vaso y las ahogué con un poco de bacardi. Comencé a ver que todo tenía salida cuando de verdad quieres encontrarla. Y que a veces pensar, estaba de sobra.
Que no importa lo que los demás digan de ti. Que los espejos son bien mentirosos, lo que va dentro no lo muestran y a veces engañan.
Sentí que cuando todas las luces se apagan, siempre llega alguien que te cede su linterna y te calma diciéndote que todo va a salir bien.
Pero lo más importante, es que empecé a creer que todo acaba bien. 
Porque "si quieres, puedes" es real, porque todo esfuerzo tiene su recompensa, y lo que siembras es lo que acabarás recogiendo. 
Así que dejé el odio, la ira y mis malas ideas a un lado y empecé a ver a la gente más allá de lo que a veces eran capaz de mostrarme. Fui capaz de mirar a los ojos y darme cuenta que no siempre la gente es cómo la vemos. 
Que cuando alguien sonríe quizá acababa de llorar de pena, o que quién no te dice te quiero continuamente es quién más se preocupa de ti.
Pero normalmente estamos tan ocupados detrás de quién nos regala los oídos que no vemos a quién suspira por nosotros en silencio.
Por todo ellos, aprendí a observar, a callar y sonreír cuando veía algo que me gustaba. A guardarme las cosas para mí, pero a compartirlas cuando era necesario. 
Porque si tú sonríes, la vida te devuelve la sonrisa, el problema es de quién no sabe sonreír. Pero no sirve de nada cerrarse, pensar que nadie puede ayudarte, el mundo está repleto de personas que se matan por enseñarte a hacerlo.

"Y yo siempre estaré dispuesta a ayudarte."