forte

viernes, 30 de diciembre de 2016

Feliz final de año

Este año no quiero hacer balance. No quiero recordar las cosas que hice mal para no volver a repetirlas en un futuro como suele decirse. Me duele. Y aunque la gente se empeñe en decir que "de los errores se aprende", no me apetece emplear las últimas 24 horas de mi 2016 en recordarme a mí misma la de veces que me quemé con el horno; cuántas veces debí darle la razón a alguien que simplemente me aconsejaba o en su defecto: el mal ojo que tuve de nuevo con todos los individuos del sexo opuesto por los que juré que esta vez me enamoraba de verdad. No, no, no y mil veces no. No quiero esclavizarme de mi propia pena para volver a tener que auto-compadecerme minutos después.

Es por eso, que en su lugar enumeraré algunas de las cosas que me hicieron felices estos 11 meses y 30 días anteriores. Creo que es mucho más sano y estimulante para la entrada de año. Así que ahí van algunos momentos.

1. El primer contacto real y programado con niños dentro de la Universidad.

2. Aquella noche que cené en casa de mi prima con mis padres.

3. La cena con mis amigas en aquel bar de las Setas donde nos cobraron media ración como una tapa y nos callamos. (Sí, somos unas anti-sistemas y unas vándalas poco honradas.)

4. Cuando enfermé en Santiago de Compostela y aquella enfermera fue tan amable conmigo. Al igual que la farmacéutica. (Y Cristina.)

5. Ver la sonrisa nueva de mi madre.

6. Las confesiones en un parque con una fanta y un aquarius acompañado de risketos y gusanitos con mi amiga Maggie.

7. Cada uno de los abrazos de mi mejor amigo.

8. Volver a ver a Lulú, a Miguel y a la gordi y conocer a Leti.

9. Pasar mucho tiempo con mi bugui.

10. Beber manzanilla con mi amigo Javi.

11. Las barbacoas en el campo de Marta.

12. CONIL.

13. ROMA.

14. La única locura que he hecho por amor.

15. Hacer la tortilla de patatas más rica de mis tres años como estudiante independizada.

16. Volver a vivir con Claudia y Mónica. Y casi vivir con MªÁngeles.

17. Las Kardashian después de almorzar.

18. Ir al cine y emocionarme.

19. Comer buñuelos por el centro con mis padres.

20. Las noches de bolos con mis amigas.



jueves, 3 de noviembre de 2016

Noviembre dulce


No se si todo el amor comenzó siendo amor en un principio. Hay quien dice que cuando te llega, lo notas. Y que cuando conoces a la persona perfecta, no te importa todo lo que venga después porque sabes que será con él o con ella y te da igual. Te da igual si las cosas irán mejor o peor, porque sabes que esa persona especial entrará dentro de tus planes y entonces ya nada podrá parecerte suficientemente malo como para eludir quién te acompaña.
No se si todo esto es verdad o simple palabrería de historia romántica. 
Porque a decir verdad no se mucho sobre amor. 
A veces pregunto, y a veces improviso sobre la marcha. 
Porque es así como creo que debería ser el amor. 
Valiente, poco perezoso, despreocupado, carente de "qué dirán", sencillo, divertido. 
Es así como yo veo el amor. 

Deberías ser valiente para confiar y no tener miedo de que te dañen.
Deberías no dejar para mañana los besos que puedes dar hoy.
Deberías no preocuparte tanto por cosas absurdas y dar más valor a los detalles que de verdad importan.
Deberías apartar a un lado todo lo que los demás piensen.
Debería ser sencillo. Deberías divertirte, porque ante todo, deberías ser feliz.



miércoles, 24 de agosto de 2016

No me pidas que me quede

No me pidas que me quede. 
No me agarres del brazo a mitad de camino.
No me ruegues que deshaga una maleta que tú mismo me impulsaste a llenar de "lo sientos" y algún que otro trapo viejo.
No hagas que me de la vuelta y mire atrás cuando ya no haya nuevo que ver entre nosotros.
No me pidas que me quede cuando ya no quieres que me quede, solo porque necesites que lo haga.
Deja que me vaya cuando te fallen las ganas de que esté. Cuando no nos sonriamos al tropezar, cuando no nos besemos al despertar. Cuando un nuevo hallazgo se convierta en un minuto de silencio en vez de en unas cuatro horas de conversación y debate. Cuando odies mis manías. Cuando te aburra. 
Deja que me marche y que vuelva a ser yo misma. Que me equivoque, que aprenda, que me emocione y que me enamore otra vez. Para que posteriormente, si así sucede, sufra de nuevo.
Quiéreme lo suficiente para darte cuenta de que ya no me amas y déjame ir.
No me susurres "un tiempo" entre sollozos ni me engañes en tu fría indiferencia.
Deja que vuele alto. Que me aleje de ti. Que te olvide si es necesario.

No me pidas que me quede. Porque si tienes que pedírmelo, será que no quedan motivos suficientes para hacerlo.

jueves, 9 de junio de 2016

Felicidad se escribe con i latina

Nos pasamos la vida esperando
Esperando el amor verdadero, esperando la suerte, esperando el trabajo de nuestros sueños, esperando la familia con la que todos sueñan, esperando la casa en la playa y el piso en el centro, esperando todo lo que creemos merecer sin darnos cuenta de que no hacemos nada por conseguirlo 
Esto es como todo.
Cuando tu madre te ofrece carne, a ti te apetece pescado. En invierno no hacemos más que pedir con ansia la llegada del verano. Cuando tenemos pareja extrañamos la soledad de nuestra soltería.
Inconformistas dicen algunos, yo digo bobos
Sí, bobos.

Somos incapaces de disfrutar de lo que tenemos pensando siempre en lo que no tenemos.
  Y eso no es de ser inconformista, es de ser un bobo
De no saborear la vida tal y como se presenta
de engañarnos a nosotros mismos diciendo que lo mejor siempre está por llegar

¡Claro! Porque puede que mañana te cruces con el amor de tu vida mientras estás canjeando un cupón premiado, pero ¿y si no?
Planteate la vida de esta manera:

No hay mal que cien años dure, ni cuerpo que lo aguante. Y cada vez que la vida te da un golpe y te tumba, solo te está preparando para volver a levantarte. 
La casa en la playa, la familia modelo y el trabajo millonario están bien, pero disfruta del aquí y del ahora, de lo que la vida te esté regalando en este moemnto, vive todas las sensaciones y no tengas miedo a nada, y menos a sentir -sea lo que sea-

y sobre todo ríete aunque estés solo si algo te hace gracia, porque es mejor parecer un loco feliz, que un cuerdo sin esperanza. 

martes, 19 de abril de 2016

Carta a mi futuro

Lo siento

Así empieza la misiva condenada a ser despedida
Porque así comienzan todas las cosas que tengo que contarte
Disculpándome

Pidiéndote que entiendas a esta pobre cría que no tiene otra cosa 
que miedo a que el amor vuelva a reírse de ella
Es por esto que lo siento si me cuesta creerte.
Que lo siento si no te beso cuanto debería.
Porque puede que suene a excusa 
pero no quiero acordarme de ti justo antes de dormir y lo siento.

Siento ser demasiado y a veces no llegar a ser suficiente 

Y siento ser la que siempre se disculpa,
pero

...ahí me quedé, y ahora que ya nada me queda por decir
creo que me entiendes

Porque estamos condenados a disculparnos
a despedirnos
pero ante todo, a encontrarnos




lunes, 15 de febrero de 2016

Febrero...



...Es un gran camaleón,
y a los cobardes los vuelve valientes...
El rey se convierte en bufón
y la justicia la canta la gente...